viernes, 17 de noviembre de 2023

LA SERPIENTE MÁS ANTIGUA DE MESOAMÉRICA.

(Prof. Javier Tovar)
Cuando leemos en el Libro de Mormón, que Cristo vino a América, dejamos de pensar en los detalles de su venida. Por ejemplo, no pensamos en que nuestro Salvador, resucitado, debió hablar la lengua de la cultura que visitó. Si llegó a Mesoamérica, como la mayoría de los estudiosos cree, entonces muy seguro se dirigió a los pobladores en el idioma maya. SI llegó a otros pueblos, se habría dirigido en su propio idioma; quechua, aimara, guaraní, etc.
Hablando de la época prehispánica de Mesoamérica, específicamente en el área maya, fue común referirse a su divinidad principal como Kukulcán, que significa “la serpiente emplumada”. En el Altiplano Central le llamaron Quetzalcóatl. En ambos casos trataba del dios del cielo y la tierra.

¿Por qué serpiente emplumada?
Porque hace referencia a dos cualidades del Dios visitante: la de estar en el cielo, como un ave, y de estar o bajar a la tierra como una serpiente. Y es que el significado de Kukulcán o Quetzalcóatl se refiere a “la serpiente emplumada”; el ser que del cielo (el ave), bajó a la tierra (serpiente), para vivir con los hombres. El ave representa el cielo, por eso el símbolo de la pluma y la serpiente representa la tierra porque es un animal que está totalmente pegado a ella. Y no es la primera vez que al Salvador se le asoció con una serpiente, en la Biblia, en Números 21:8-9, los hebreos utilizaron una serpiente de bronce, que, puesta en una asta, curaba al enfermo que dirigía su mirada al símbolo. La serpiente era la representación de Jesucristo.

En San José Mogote, Oaxaca, se encuentra una de las representaciones de la "serpiente emplumada", más antigua de Mesoamérica. Se trata de la representación que se encuentra en un plato que data entre los años 1500 a 800 antes de Cristo. Evidentemente estamos hablando del Preclásico. Allí podemos ver claramente el dibujo de una serpiente que tiene plumas en el cuerpo y en la coronilla de su cabeza.
Es de las representaciones de serpientes, más antiguas que conocemos, incluyendo la serpiente que se encuentra en el Monumento 19 de La Venta, Tabasco.
Lo interesante del tema, es que en esta época en que se encontró el vestigio, están mencionados los Jareditas en el Libro de Mormón, específicamente en Éter, e incluso el Mapa Modelo de la Geografía del Libro de Mormón, coloca el área de Oaxaca, como un lugar fronterizo con tierras Jareditas.
Por lo que podríamos deducir que, fue lógico que los habitantes de San José Mogote supieran acerca de Jesucristo.
No es nada difícil entonces, que hayan dibujado al Salvador, tomando dos de sus atributos: Estar en el cielo y bajar a la tierra para convivir con el hombre.
(Plato con la figura de una serpiente emplumada. Museo de sitio de San José Mogote. Foto Prof. Javier Tovar)

Por su ubicación cercana a tierras Jareditas, San José Mogote está propuesto para ser la “Tierra de Morón, mencionado en Éter 7:6 en el Libro de Mormón.

En el monumento 19 de La Venta, también tiene la representación de la serpiente, en este caso está formando una cueva con su cuerpo, adentro de la cueva se halla un personaje sosteniendo unas planchas. La serpiente tiene un copete de plumas, evidenciando que se trata de la “serpiente emplumada”.
La Venta, municipio de Huimanguillo Tabasco, es un sitio arqueológico del preclásico ya que se encuentra fechado en los años 1,200 a 400 antes de Cristo, por lo que claramente podemos decir que está fechada en el mismo tiempo de los Jareditas.
(Monumento 19. La Venta Tabasco. Foto: Mediateca INAH)


Las serpientes emplumadas como las que se encuentran en el plato del Museo de sitio de San José Mogote y la del Monumento 19 de La Venta en Tabasco, son un claro ejemplo de que, desde tiempos preclásicos, los pueblos originarios de Mesoamérica conocieron y deificaron al Dios blanco y barbado que algún día los visitaría como lo dijo la profecía, y que efectivamente se cumplió. El Salvador vino al continente americano después de su Resurrección.

ENCUENTRAN HUESOS DE CABALLO DE LA ÉPOCA DEL LIBRO DE MORMÓN. (Profesor Javier Tovar) Podría ser ésta la noticia del año; se acaba de public...